Horacio Colomé | San Valentín
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San Valentín

Hoy el calendario nos brinda la oportunidad de celebrar el amor, la amistad y el cariño independientemente de la religión, sin importar la orientación sexual.

En la edad media se hablaba de un amor cortés en donde el sentimiento de afecto se expresaba de una forma sincera, noble, sin filtros y con declaraciones poéticas románticas.

El máximo representante era el dios Cupido que, curiosamente, fue hijo de Venus (diosa del amor) y Marte (dios de la guerra).

Toda esta retahíla porque en mi caso de pequeño aprendí que un hombre tenía que ser un guerrero ante la vida. Un soldado fuerte y acorazado del mundo emocional para evitar el dolor y poder seguir adelante. Un hombre no puede llorar porque muestra su vulnerabilidad y eso es de mujeres.

Aunque lo parezca, no escribo con rencor ni culpando a nadie. Si pasé por una etapa en la que, con rabia, tenía claro que, si mis padres me hubiesen educado de otra forma, sería más feliz.

HOY, escribo estas líneas con agradecimiento porque gracias a ellos soy lo que soy y me doy cuenta de que esa parte sensible, vulnerable y romántica que tengo convive perfectamente con el hombre guerrero que lucha día a día con amor para seguir evolucionando.

 

“Soy un poeta sensible pero también un luchador. Juega, ámate, ama y déjate amar”

 

¡FELIZ SAN VALENTÍN!

Horacio Colomé.

14/02/2020.

 

 

 

 

 

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